La numerología es una herramienta muy valiosa para conocer como será el destino de cada uno. En muchas oportunidades, se tiene en cuenta para identificar distintos parámetros y momentos que va a vivir cada persona en diferentes épocas del año.
La numerología es una herramienta muy valiosa para conocer como será el destino de cada uno. En muchas oportunidades, se tiene en cuenta para identificar distintos parámetros y momentos que va a vivir cada persona en diferentes épocas del año.
En esta ocasión, se conocerán más detalles acerca de los números kármicos. Son aquellos que revelan como fue la vida pasada de cada uno y delata las cosas que se hicieron mal y se deberán corregir.
Según indica la numerología, no todas las personas están atadas bajo un número kármico. Es que, la explicación indica que estos están destinados a las almas que acumulan una deuda en sus vidas pasadas. Dichos números podemos deducirlos de sumar la fecha de nacimiento y está referido a individuos que, en vidas pasadas, no han realizado las cosas de buena manera y tuvieron saldo negativo y también malicioso.
Para obtener el número kármico debemos sumar todos los dígitos de la fecha de nacimiento. Tomando un ejemplo de una persona nacida el 27 de noviembre de 2001, entonces el resultado sería: 2+7+1+1+1+2+0+0+1= 14. De esta manera, lo que obtenemos es un número del karma por eso no debemos reducir el valor. Pero, en cambio, si tomamos como otro ejemplo a un nacido el 28 de febrero de 1973, sumará: 2+8+0+2+1+9+7+3=32, se continúa reduciendo 3+2=5.
Esta cifra se relaciona directamente con la muerte y la resurrección. En vidas pasadas, estas personas no fueron positivas y nunca dieron todos sus esfuerzos para lograr sus objetivos. Por eso, la misión en la vida será trabajar duro para conquistar las metas individuales.
Quienes tengan este número son individuos con mucho enojo acumulado. No pueden dominar de buena manera la agresividad y, por eso, en esta vida tendrán que mejorar en aspectos de amor, compasión y humildad.
El 16 se relaciona, directamente, con la frustración. Lo poseen personas que han sido el centro de todo y nunca han mirado para los costados. Por eso, ahora tendrán que aprender a fracasar, a levantarse de las derrotas y ser optimistas.
Por último, encontramos a este número que está aparejado con personas que han sido manipuladoras. Ahora, deben mostrarse tal y cual son para poder recibir instrucciones de los demás.