Jugó en clubes del ascenso, llegó a Boca, fue amigo de Maradona y hoy atiende una agencia de lotería

Tuvo una larga carrera en Argentina y el exterior, pero después de su retiro decidió alejarse del fútbol y dedicarse a una actividad completamente diferente.

Muchos exjugadores siguen ligados al mundo del fútbol después de retirarse, ya sea como entrenadores, representantes o dirigentes. Sin embargo, otros eligen alejarse de las canchas y ganarse la vida en actividades totalmente distintas. Ese es el caso de un ex Boca que fue amigo de Diego Maradona y hoy atiende una agencia de lotería.

Se trata del uruguayo Richard Tavares, quien comenzó su carrera como marcador central en All Boys, pasó por Boca y Quilmes y jugó 10 años en el fútbol mexicano, aunque le quedó la espina de nunca haber sido convocado a la Selección de su país. Se retiró a los 36 años y actualmente, a los 61, vive en Buenos Aires.

"El fútbol fue casi toda mi vida. Cuando colgué los botines, estuve dos años en los que no hice nada. Realmente me aburría. Por lo menos acá, en la quiniela, estoy con gente, charlo y hablo, me entretengo. Soy una persona normal y me agrada. Disfruto de lo común a diario", aseguró a Infobae.

Richard Tavares, exfutbolista

La carrera de Richard Tavares

Richard Edunio Tavares nació el 24 de mayo de 1964 en Salto, Uruguay, y se crió en Las Piedras, a 20 kilómetros de la capital. Empezó a jugar al fútbol en Montevideo Wanderers. Cuando tenía 14 años, su familia se mudó a Concordia, Entre Ríos, donde llegó a jugar en Primera en un equipo del Regional.

Allí conoció a Federico Vairo, exjugador de River, quien lo ayudó a dar el salto a Buenos Aires. Debutó en All Boys en 1983 y la temporada siguiente jugó para Racing de Córdoba. Sin embargo, él quería volver a la capital: se peleó con el entrenador y se fue cedido a préstamo a Sportivo Italiano.

Su buen desempeño hizo que Independiente y Boca se interesaran en él. El defensor terminó eligiendo al club de la Ribera por su condición de hincha y porque creyó que le serviría de vidriera para irse al exterior. La adaptación fue difícil. El técnico Roberto Saporiti no lo conocía y lo tuvo nueve meses sin jugar.

Recién pudo debutar bajo la dirección de Omar Pastoriza, nada más y nada menos que en un Superclásico de verano. Tras dos años en Boca, le surgió la oportunidad de jugar un año en Monterrey. Luego pasó por Quilmes y Chaco For Ever antes de volver a México, donde se quedó 10 años. En esa época conoció a Maradona.

Richard Tavares en Boca

"La relación se generó más por mi hija mexicana, ya que su madrina es Gabriela Villafañe, hermana de Claudia. A través de ella conocí a Diego. En el casamiento de Gabriela y Marcelo fue la primera vez que lo vi. Luego, estuve en el casamiento de Diego y Claudia en el Luna Park, en los bautismos de Dalma y Gianinna, vino a mi casa al cumpleaños de mi hijo, Braian, y armamos una linda amistad", contó.

Su vida después del retiro

Tavares se retiró a los 36 años por una lesión en el tendón de Aquiles, y tanto él como su familia decidieron volver a Buenos Aires para estar cerca de sus seres queridos. "Me recibí de director técnico y tuve a un amigo como ayudante, pero no fue algo que me apasionó. Me gusta estar los fines de semana en mi casa, comiendo un asado con amigos, más que estar dirigiendo", confesó.

De hecho, su manera de ganarse la vida está completamente desligada del fútbol. "Tengo una agencia de quiniela en La Paternal. Atiendo por la mañana y, pasado el mediodía, manejo una casa de repuestos en Warnes en sociedad con mi cuñado. Mi mujer es la que la administra. Soy un tipo sencillo, con una vida aburrida, tranquila, normal", sostuvo.

TEMAS RELACIONADOS
DEJA TU COMENTARIO: