De acuerdo a uno de los últimos estudios médicos, se pudo identificar cuáles son los períodos específicos durante el día que aumentan los beneficios de la exposición solar mientras minimizan sus riesgos potenciales. Esta información es muy importante para aprovechar las propiedades saludables de la luz solar, especialmente en lo relacionado con la producción de vitamina D.
La exposición controlada a los rayos solares puede fortalecer los huesos, regular la presión arterial y estimular el sistema inmunológico. Pese a esto, es muy importante mantener un equilibrio, ya que solo se necesitan 15 minutos diarios para que el organismo sintetice la cantidad necesaria de vitamina D, estimada entre 400 y 600 UI para un adulto.
La temporada de verano representa un desafío particular en este aspecto, ya que las prolongadas jornadas al aire libre pueden transformar lo que debería ser una breve exposición que se traduzca en beneficio, en un importante riesgo para la salud.
A qué hora es mejor tomar sol para que le haga bien al cuerpo
Las primeras horas de la mañana hasta el mediodía, y el período vespertino desde las 17:00 hasta el ocaso, forman parte de los momentos óptimos para la exposición solar. Durante estos intervalos, los rayos solares inciden de manera menos directa sobre la superficie terrestre, reduciendo significativamente los riesgos asociados.
Por el contrario, el lapso comprendido entre el mediodía y las 17:00 horas debe evitarse, ya que coincide con los niveles más elevados de radiación solar. Durante este período, aumenta considerablemente el riesgo de desarrollar problemas cutáneos, desde insolaciones hasta condiciones más graves.
La protección solar resulta imprescindible independientemente del horario elegido. Los especialistas recomiendan aplicar protector solar de alto factor, renovándolo cada dos horas. Esta precaución debe mantenerse incluso en días nublados, ya que las nubes no bloquean completamente la radiación ultravioleta.
Para sesiones prolongadas, se aconseja alternar la exposición solar con baños en agua, ya sea de mar o en piletas, lo cual ayuda a mantener la hidratación cutánea y regular la temperatura corporal. Los expertos comentaron que no se debería estar bajo el sol más de una hora diaria, incluso tomando estas precauciones.
Es importante recordar que, aunque el sol proporciona beneficios vitales, la exposición excesiva puede provocar envejecimiento prematuro, daños oculares y aumentar el riesgo de melanoma, considerado uno de los tipos más peligrosos de cáncer. Cualquier cambio en lunares o heridas que no cicatrizan requiere atención médica inmediata.