Fitness: los mejores alimentos y platos para cenar tras un entrenamiento

Debido al ritmo de vida acelerado, el trabajo y otras obligaciones, cada vez son más las personas que eligen ir al gimnasio o hacer alguna actividad fitness a última hora del día, justo antes de cenar e irse a dormir. En este contexto, una duda muy común es cuáles son los mejores alimentos y platos para cenar después de un entrenamiento.

La pregunta tiene su lógica. Por un lado, es clave incorporar los nutrientes que el cuerpo perdió durante el ejercicio para que los músculos puedan recuperarse correctamente; por otro, es importante que sea una comida liviana para facilitar el proceso de digestión durante el sueño.

En estas situaciones, los expertos recomiendan hacer una merienda más contundente, rica en carbohidratos y proteínas, unas dos horas antes de entrenar. De esta manera se puede comer una porción más pequeña durante la cena, evitando las grasas, y desayunar bien al día siguiente para reponer energías.

Comer después de entrenar, comida saludable

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Los mejores alimentos para cenar post fitness

Los mejores alimentos para cenar después de un entrenamiento fitness son aquellos que aportan fibras, proteínas y carbohidratos. En general, se recomienda consumir cereales, legumbres, verduras, frutas y carnes blancas, pero también otros más específicos:

• Huevo: es muy rico en proteínas y contiene aminoácidos esenciales que ayudan a reconstruir los músculos. Es mejor cocido y no frito.
• Pescado: contiene aminoácidos esenciales, omega 3 y antioxidantes que contribuyen a la recuperación.
• Banana: permite recuperar las reservas de glucosa del organismo a través de azúcares naturales, no procesados.
• Leche de soja: es rica en vitaminas, minerales, fibra, proteínas y grasas saludables, por lo que se recomienda mucho en batidos.
• Quinoa: aporta una gran cantidad de carbohidratos.

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Ejemplos de platos para cenas fitness

Algunas ideas de platos completos y nutritivos para cenar después de una actividad fitness son: ensalada de atún o pollo con lentejas, sopa crema de verduras con tostadas de hummus, salmón con papas o boniato, ensalada de quinoa, salteado de verduras con frutos secos y huevo duro o pavo con papas al horno. Lo mejor es consultar con un nutricionista que elabore un plan de alimentación adaptado a las necesidades de cada persona.