Los mejores 3 trucos para sacarle el sabor amargo a la cebolla

Es un ingrediente base en muchos platos y aporta un toque muy difícil de reemplazar, pero a veces su gusto puede ser un poco intenso. Con estas técnicas quedará perfecta.

La cebolla es uno de esos ingredientes fundamentales que no pueden faltar en cualquier cocina. Está en la base de numerosos guisos, arroces y comidas a la olla, y también aporta un toque fresco y crocante en sándwiches y ensaladas. Sin embargo, a veces su sabor puede ser muy intenso, por lo que es importante conocer estos tres trucos para sacarle el gusto amargo a la cebolla.

Lo primero que hay que saber es que el sabor de una cebolla depende de su variedad, frescura y la forma en la que se cocina. Por ejemplo, las que ya están un poco pasadas suelen ser más amargas que las cebollas frescas; las moradas son más suaves y dulces, mientras que las blancas resultan más fuertes y picantes.

La técnica de cocción también influye en el sabor de la receta: si se sirven crudas o encurtidas, tendrán un gusto más amargo; por el contrario, si se preparan caramelizadas o cocidas, el sabor será más dulce. Para asegurarse de que la cebolla quede perfecta, se puede recurrir a distintas técnicas culinarias.

Cebolla
El famoso chef vasco Karlos Arguiñano, comparte a diario valiosos trucos de cocina, uno de esto es un consejo infalible para cortar cebollas sin lágrimas

El famoso chef vasco Karlos Arguiñano, comparte a diario valiosos trucos de cocina, uno de esto es un consejo infalible para cortar cebollas sin lágrimas

Cómo sacarle el sabor amargo a la cebolla

Un truco muy útil para sacarle el sabor amargo a la cebolla consiste en cortarla y, antes de sumarla a la receta que se esté preparando, colocarla por separado en un bol o recipiente con una pizca de sal y un chorrito de vinagre o jugo de limón. Es importante mezclar bien y dejarla reposar durante unos minutos. De esta manera, los ácidos del limón o vinagre neutralizarán el sabor amargo.

Otra técnica que funciona muy bien es sumergir la cebolla durante unos segundos en agua hirviendo y luego pasarla inmediatamente a otro recipiente con agua helada. Esto suavizará el gusto intenso y picante.

A diferencia de los anteriores, el tercer truco se debe aplicar al momento de la cocción y no antes: hay que cocinar las cebollas lentamente y a fuego bajo, ya que su sabor queda más suave que cuando se cocinan a fuego alto y rápido.

TEMAS RELACIONADOS
DEJA TU COMENTARIO: