Qué es mejor cuando tengo dolor de garganta: tomar algo caliente o frío

El malestar en la garganta es una molestia común que, aunque suele resolverse sin tratamiento médico, puede afectar el bienestar diario. La sensación de ardor, picazón o sequedad puede aliviarse con medidas simples en casa, pero surge la duda sobre cuál es la mejor opción: consumir bebidas calientes o frías.

Los remedios caseros, como infusiones tibias y gárgaras con agua salada, fueron utilizados durante generaciones para aliviar la irritación. Pese a eso, algunos encuentran alivio con bebidas frías o helados. Ambas alternativas pueden ser efectivas dependiendo de la causa del dolor y de la reacción de cada persona, por lo que es importante conocer cómo influyen en la garganta y cuál de estas opciones puede brindar un mayor alivio según el tipo de molestia.

Toma algo caliente

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Qué hace mejor cuando tenés dolor de garganta: tomar algo caliente o frío

Las bebidas calientes, como tomar un té o caldo, contribuyen a mantener la hidratación y pueden calmar la irritación, además de generar una sensación de confort. Además, hacer gárgaras con agua tibia y sal ayuda a reducir la inflamación y desinfectar la zona. Chupar caramelos duros o pastillas también puede ser útil, ya que estimulan la producción de saliva y alivian la sequedad.

Por otro lado, los alimentos a baja temperatura, como helados o bebidas frías, pueden resultar beneficiosos en ciertos casos. El frío actúa como un anestésico natural, reduciendo la inflamación y aportando alivio temporal. Sin embargo, no en todos los casos es recomendable, ya que algunas personas pueden experimentar mayor irritación con temperaturas bajas.

Dolor de garganta

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Independientemente de la elección, es muy importante mantener la garganta hidratada, evitar el tabaco y ambientes con humo, y protegerse de cambios bruscos de temperatura. Además, se recomienda usar humidificadores para que ayuden a mantener la humedad del ambiente y prevenir la sequedad en la garganta.

Si el dolor persiste por varios días, se acompaña de fiebre alta o dificultad para respirar, es recomendable consultar a un médico para descartar una infección bacteriana u otra afección que requiera tratamiento específico.