En Río de Janeiro, Brasil, hay una infinidad de atractivos turísticos de todos los tipos, museos interesantísimos, edificios sorprendentes, monumentos únicos, barrios con un carácter propio, su famoso carnaval y por supuesto una rica gastronomía de todo el mundo, locales de música en vivo, discotecas y un gran etcétera.
Sin embargo, otro de los mayores atractivos de Río son su naturaleza, kilómetros y kilómetros de playas de arenas doradas, montañas de antojadizas formas, enormes lagunas y gigantescas extensiones de selva tropical, que se entrelazan con edificios y avenidas creando un paisaje único que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad.
Para los amantes de este escenario, se detallará una lista de 3 playas desiertas en Río que son unos verdaderos paraísos escondidos.
Playa de Joatinga
Esta es una de las playas desiertas en Río de Janeiro que están más cerca del centro y por tanto es más fácil llegar a ella. Se encuentra situada entre los barrios de São Conrado y Barra da Tijuca, dentro de un condominio cerrado que es necesario atravesar para llegar a la playa. El acceso es por la Estrada do Joá y sólo se puede llegar en vehículo propio (no hay transporte público).
Una vez pasado el control del condominio, hay unos cuantos lugares para estacionar y desde allí hay que seguir un pequeño sendero que conduce a la franja de arena. La playa es pequeña y debes tener en cuenta que sólo es accesible durante los períodos de marea baja.
Playa de Prainha
Se trata de una playa desierta, o por lo menos, casi desierta, que tiene la ventaja de ser de las más cercanas al centro de Río. Como todas las otras playas alejadas del ajetreo y la multitud, se encuentra en la zona oeste de la ciudad, donde la densidad de la población disminuye y la naturaleza se muestra más salvaje.
La playa de Prainha se encuentra en Recreio dos Bandeirantes en el borde costero de la Reserva Natural de Prainha, una importante zona de protección ambiental. Es de las más accesibles y aunque es una de las preferidas por los amantes del surf por sus excelentes olas, también tiene zonas perfectas para familias con niños, por eso debes tener en cuenta que durante los fines de semana quizá haya más gente de la que esperas.
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Playa de Grumari
Se trata de otra de las playas desiertas en Río que está dentro de una Reserva Natural llamada Parque Grumari, una enorme área protegida llena de marismas, manglares y una gran riqueza en fauna autóctona.
La playa de Grumari está cerca de la playa de Prainha aunque quizá sea algo más solitaria, especialmente durante los días de semana, ya que los fines de semana es frecuentada por más cariocas, al igual que la otra. La playa tiene más de 2 kilómetros de extensión, su mar es cristalino y sus arenas blancas, por lo que se trata de un lugar verdaderamente paradisiaco.