El presidente de Brasil, Lula da Silva, respondió a los aranceles que impuso su par de Estados Unidos, Donald Trump, a los productos extranjeros y afirmó que el país vecino cuenta con un "colchón" de reservas para "enfrentar cualquier crisis".
El presidente de Brasil destacó sus mandatos anteriores y afirmó que ese país cuenta con "un colchón de u$s350.000 millones", tras la medida de su par de Estados Unidos.
El presidente de Brasil, Lula da Silva, respondió a los aranceles que impuso su par de Estados Unidos, Donald Trump, a los productos extranjeros y afirmó que el país vecino cuenta con un "colchón" de reservas para "enfrentar cualquier crisis".
Durante un acto en el estado de Sao Paulo, Lula da Silva destacó el nivel de reservas que se concretó durante sus gestiones anteriores como presidente de Brasil, entre 2003 y 2010. "En mis dos primeros mandatos hicimos una acumulación de reservas internacionales que puede enfrentar cualquier crisis, incluso cuando el presidente Trump diga lo que quiera", expresó.
"Brasil está seguro porque tenemos un colchón de u$s350.000 millones que nos dan cierta tranquilidad. Brasil tenía problemas para crecer y en esos años pagamos al FMI y logramos crecer e hicimos reservas internacionales que siguen hasta hoy", agregó en esta línea.
Los dichos del líder del Partido de los Trabajadores se produjeron luego de que Trump anunciara una barrera mínima del 10% a los productos que ingresarán a Estados Unidos, que también afectará a Brasil. Ante esta situación, representantes del Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior brasileño se reunieron con autoridades estadounidenses para negociar una disminución en el impacto de los aranceles.
Ya rige en Estados Unidos la imposición del arancel global del 10% sobre todos los productos importados al país norteamericano, medida impulsada por el presidente Donald Trump y que afecta a la Argentina.
Esta normativa marca una intensificación en las tensiones comerciales internacionales, según informó la Casa Blanca, a la vez que generó derrumbes en los mercados de todo el mundo.
El anuncio tuvo lugar el 2 de abril, jornada que el presidente Trump calificó como “el Día de la Liberación”, cuando confirmó la aplicación de este arancel a 184 países y territorios, como así también a la Unión Europea. La orden ejecutiva, firmada el miércoles pasado, exceptúa de forma temporal a Canadá y México, además de eximir a las mercancías que ya estaban en tránsito hacia puertos estadounidenses antes del inicio oficial de la medida.
Asimismo el nuevo arancel se suma a una serie de incrementos selectivos que entrarán en vigor el próximo 9 de abril, con tasas adicionales del 20% para productos europeos y del 34% para China. En el caso de Vietnam, en tanto, se aplicará un arancel del 46%,
Según la Casa Blanca, la medida busca corregir déficits comerciales atribuidos a prácticas de “ausencia de reciprocidad” y a políticas fiscales como los “impuestos al valor agregado exorbitantes” en economías socias.
Las consecuencias se reflejaron inmediatamente en los mercados financieros. El viernes, Wall Street cerró con fuertes caídas, en sintonía con retrocesos en las principales bolsas de Asia y Europa, en un contexto de creciente temor a una recesión global.
Por otro lado, el banco JPMorgan Chase elevó de un 40% a un 60% la probabilidad de una recesión mundial, mientras que la consultora Oxford Economics estimó que el nuevo régimen arancelario efectivo en Estados Unidos podría alcanzar el 24%, superando los niveles de la ley Smoot-Hawley de 1930.