Tras el sacudón mundial que generó el anuncio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de subirle aranceles a la mayoría de las economías del mundo y la posterior respuesta de China, este martes la Casa Blanca decidió profundizar la guerra económica e incrementar al 104% los aranceles al gigante asiático.
La noticia fue confirmada por la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt. La nueva tarifa para los productos importados de China comenzará a regir a partir de las cero horas del días miércoles 9 de abril. Ante la noticia, se espera una prostra por parte del gobierno de Xi Jinping.
"Esto es la guerra comercial desatada en su máxima expresión. El 104% le va a encarecer la vida a los estadounidenses porque cada producto que tengan que importar de China van a tener que pagarlo a más del doble", opinó el periodista especializado en política internacional, Gabriel Michi, en C5N.
Este martes el gobierno chino dijo que no se va a dejar chantajear por el gobierno de Trump e informó que va a incrementar las represalias en virtud a los aranceles impuestos a los productos estadounidenses que llegan a China. Además China salió al cruce de los Estados Unidos por su posición contraria a la continuidad del swap de monedas entre la Argentina y el país asiático y le pidió que tenga "una perspectiva correcta".
A través de un portavoz oficial, el gobierno de Xi Jinping aseguró que "el intercambio de divisas entre China y Argentina contribuye a la estabilidad económica y financiera del país y es bien recibido por el gobierno argentino".
En ese sentido, "instó a Estados Unidos a que adopte una perspectiva correcta y comience a pensar en cómo puede contribuir al desarrollo de los países de América Latina y el Caribe". La posición del gobierno chino fue en respuesta a una declaración del asesor para Latinoamérica, Mauricio Clever Carone, quien pidió que cese el crédito entre ambos países.
Clever Carone vinculó el acuerdo con el FMI a que se cancele esta asistencia: "Queremos que termine la famosa línea de crédito que tiene Argentina con China", enfatizó.
El swap de monedas entre Argentina y China alcanza a unos u$s17.500 millones, que se computan dentro de las escasas reservas brutas internacionales que alcanzan a U$S 24.791 millones.