El Gobierno apuntó contra La Fraternidad y calificó el paro de trenes como "extorsivo"

"Un millón de argentinos que no gozan del privilegio de la casta sindical, perdieron dinero, tiempo y muchos de ellos el día de trabajo", señaló el vocero Manuel Adorni. Desde Trenes Argentinos informaron que el Estado perderá más de $100 millones de pesos en pasajes no vendidos.

El Gobierno apuntó este martes contra el gremio de La Fraternidad al calificar como "extorsivo" el paro de trenes que se llevó a cabo de 9 a 15 en todo el país. El vocero presidencial Manuel Adorni aseguró que debido a la medida de fuerza, "un millón de argentinos que no gozan del privilegio de la casta sindical, perdieron dinero, tiempo y muchos de ellos el día de trabajo".

En una conferencia de prensa donde anunció al nuevo procurador general del Tesoro, el funcionario ironizó con el paro al afirmar recordar que se hace "en un contexto de baja de inflación, los salarios llevan ocho meses de recuperación y el índice de pobreza se redujo 16 puntos del primer al tercer trimestre".

A su vez, realizó una comparación con las medidas de fuerza llevadas a cabo por el sindicato en años anteriores: "Este mismo gremio le hizo cero paros a la administración pasada, que se fue con una inflación del 200% y una acumulada que superó el 1000% de inflación, destrozando el salario de los trabajadores. Allí no veían necesario hacer un paro, pero hoy sí".

"Es difícil entender cuáles son los intereses que defiende este gremio y cuál es la Argentina en la que desean vivir. Si no le hacían paro a los que destruyeron el país, es difícil pensar cuál es la Argentina que quieren a futuro. Los argentinos ya saben quién es quién y más pronto que tarde este tipo de personajes sindicales serán parte de un mal recuerdo", agregó.

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El vocero presidencial Manuel Adorni se refirió al paro de trenes en conferencia de prensa.

El vocero presidencial Manuel Adorni se refirió al paro de trenes en conferencia de prensa.

Adorni luego aclaró que "la gran mayoría de los gremios que pertenecen a la comunidad ferroviaria han aceptado las paritarias y están de acuerdo con los planteos que hacemos" y sostuvo: "Entendemos que es un apriete de una porción de los sindicatos que intervienen. Es una cuestión estrictamente política, además de ser una extorsión".

En el mismo sentido el vocero presidencial aclaró que "el Gobierno no solo no se siente responsable, sino que hizo todo para que los trenes funcionen, dentro de las circunstancias heredadas, con la mayor normalidad posible".

"Esto es típico de estos apretadores seriales que lo único que buscan es tratar de convencer a algunos distraídos de que el Gobierno son los dictadores que los oprimen. Está demostrado con buena parte de los trabajadores de los trenes".

Y sobre el final anunció que "no tenemos una definición tomada todavía", ante la consulta de si se piensa descontarle el día a los trabajadores que realizaron la medida de fuerza.

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