Naciones Unidas expresó su preocupación por el nombramiento vía decreto de jueces de la Corte

Previo a que la Comisión de Acuerdos trate el pliego del juez Manuel García Mansilla, designado vía decreto por el Gobierno para integrar el tribunal, la relatora especial de las Naciones Unidas sobre la Independencia de Magistrados y Abogados, Margaret Satterthwaite, cuestionó lo modalidad de elección al asegurar que "erosiona la transparencia" y atenta contra "la independencia judicial" que implica "una regresión en relación a la norma de igualdad de género".

"El nombramiento judicial a través de un decreto presidencial sienta un precedente peligroso al politizar las designaciones, erosionar la transparencia y limitar las vías de escrutinio y contestación pública. Al ignorar los procesos de nombramiento judicial establecidos en la Constitución y aclarados en la legislación, el Ejecutivo está evadiendo los controles y equilibrios legalmente establecidos", señaló Satterthwaite en su cuenta de X.

Luego advirtió que el Máximo Tribunal no tendrá juezas entre sus integrantes: "Este retroceso para el país podría constituir una violación del principio de no regresión en relación con las normas de igualdad de género", advirtió.

En el mismo sentido, la funcionaria de Naciones Unidas exigió que "Argentina debe cumplir con sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos, garantizar la independencia del poder judicial y respetar el estado de derecho" y acusó al Gobierno de Javier Milei de "ignorar los procesos de nombramiento judicial establecidos en la Constitución y aclarados en la legislación".

El Gobierno designó a García Mansilla y Lijo por decreto para que sean jueces de la Corte Suprema

El 26 de febrero el Ejecutivo publicó el decreto 137/2025 que oficializó la designación de los jueces en comisión para integrar el Máximo Tribunal. Dos días después, Horacio Rosatti, presidente de la Corte Suprema, le tomó juramento a Manuel García Mansilla en un ceremonia con total hermetismo llevada a cabo en el cuarto piso del Palacio de Tribunales.

Por su parte, el 6 de marzo, la propia Corte Suprema rechazó la licencia de Ariel Lijo por mayoría simple. En una inesperada decisión, los supremos Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Manuel García Mansilla consideraron que Lijo deberá renunciar a su cargo como titular del Juzgado Criminal y Correccional Federal n.º 4 si pretende asumir en la Corte. Solo Ricardo Lorenzetti se pronunció a favor de tomarle juramento al magistrado bajo licencia.

De esta manera, Lijo queda frente a una encrucijada luego de la decisión del máximo tribunal: puede quedarse como juez federal y rechazar la posibilidad de llegar a la Corte Suprema o bien puede renunciar a su cargo como juez para sumarse como el quinto integrante del tribunal.