Tras su debut como director con 30 noches con mi ex (2022), Adrián Suar regresa a la pantalla grande para dirigir y protagonizar Mazel Tov, una comedia con tintes dramáticos sobre una familia judía repleta de enredos, tensiones y secretos que nadie quiere hablar, pero que terminan saliendo a la luz. ¿Logra mostrar algo distinto en esta nueva apuesta, o se mantiene fiel a su estilo?
La trama se centra en Darío Roitman (Suar), quien regresa a la Argentina desde Estados Unidos para asistir a la boda de su hermana y al Bat Mitzvá de su sobrina, dos eventos importantes en la vida de su familia. Sin embargo, estos planes se desordenan cuando recibe una noticia crucial: la muerte repentina de su padre.
Mazel Tov explora los vínculos rotos de esta familia judía disfuncional, con una mezcla de humor y drama, en donde Darío intenta reconciliarse con su pasado y encontrar una manera de unirse a sus hermanos como lo hacía en su niñez. Pero al llegar a casa, descubre que sanar esas heridas será mucho más difícil de lo que imaginaba.
Natalie Pérez, Fernán Mirás y Benjamín Rojas acompañan al “Chueco” en el reparto, quienes interpretan a los miembros del clan Roitman. De los cuatro, es claramente Fernán Mirás quien se roba la atención con su interpretación del hermano mayor, un personaje que aporta una gran carga dramática (y a la vez, humorística) a la trama. Por otro lado, Benjamín Rojas también se destaca con su papel, ya que posee una dosis de humor que se complementa muy bien con el tono serio que -de a momentos- tiene la película.
Dentro de la filmografía de Adrián Suar, esta producción podría considerarse como una más de su repertorio: su personaje mantiene el mismo estilo que otras películas suyas y acude a recursos narrativos que ya son familiares. Sin embargo, al igual que en 30 noches con mi ex (2022), se inclina a explorar una faceta más dramática. Esta cinta es más reflexiva que sus típicas comedias de enredos.
En definitiva, Mazel Tov es una buena opción para ver en la pantalla grande si lo que se busca es una historia que combine humor con una narrativa más profunda, ya que no termina de ser una comedia del todo. Los personajes tienen una gran carga emocional y a más de uno puede “tocarle las fibras”. Pero, sobre todo, es ideal para quienes adoran el típico cine de Suar porque se mantiene bastante fiel a su estilo.