Uno de los medios de transporte más utilizados en las ciudades es el colectivo. La posibilidad de movilizarse gracias a su conexión con distintos puntos facilita el traslado de millones de personas cada día. Aunque su presencia en Buenos Aires se remonta a hace más de un siglo, aún existen dudas sobre la fecha exacta en la que comenzó a operar.
De acuerdo con diferentes registros, hay dos versiones sobre su origen: algunos afirman que su recorrido inicial tuvo lugar en la Ciudad de Buenos Aires en 1928, mientras que otros sostienen que ya funcionaba en Lomas de Zamora desde 1923. Más allá de las fechas, el colectivo evolucionó desde sus primeros días, con cambios en diseño, capacidad y funcionalidad. Su historia está llena de anécdotas y datos curiosos que reflejan la transformación de la sociedad y el transporte en el área metropolitana.
COLECTIVO línea 407
El paro fue llevado adelante por parte de los empleados de la empresa Micro Ómnibus General San Martín.
Redes sociales
Cuáles fueron las curiosidades del primer servicio de colectivos: ¿está claro el origen?
El nacimiento del colectivo se dio en un contexto de cambios en la movilidad urbana. En la década de 1920, el auge de los ómnibus y tranvías provocó una disminución en la demanda de taxis, lo que llevó a un grupo de taxistas a idear una nueva forma de transporte: el "auto-colectivo". La iniciativa surgió en el Café La Montaña y se materializó en una línea que partía desde Primera Junta hasta Lacarra y Rivadavia.
En sus inicios, estos vehículos solo tenían capacidad para cinco pasajeros y el pago del boleto se realizaba al llegar a destino, con tarifas que oscilaban entre 10 y 20 centavos. La falta de regulación generó soluciones improvisadas, como el uso de tizas en la carrocería para indicar el recorrido y, posteriormente, tableros de madera con información sobre las rutas.
Otra particularidad fue la creación de líneas exclusivas para mujeres, debido a que muchas evitaban este medio de transporte. Para fomentar su uso, los conductores contrataban pasajeras para generar confianza en otras usuarias. Con el paso del tiempo, las unidades fueron adaptándose a la creciente demanda: el primer colectivo con carrocería adaptada permitió transportar hasta 11 personas.
El servicio también estuvo marcado por eventos históricos. Durante su primer recorrido en Buenos Aires, el colectivo tuvo que esquivar los preparativos de la asunción presidencial de Hipólito Yrigoyen, lo que generó dificultades en su trayecto inaugural.
La evolución del colectivo transformó la movilidad urbana, como así también dejó huellas en la cultura y en la vida diaria de los habitantes de la ciudad. A lo largo de los años, este medio de transporte se afianzó como un elemento esencial en la rutina de los porteños y bonaerenses, manteniendo su relevancia hasta la actualidad.