En la sexta audiencia del juicio por la muerte de Diego Maradonase conocieron los detalles de la autopsia: un casi cuatro litros de agua en el abdomen, signos de una larga agonía y un corazón lleno de grasa.
Este jueves declararon los peritos que analizaron el cuerpo del futbolista y revelaron que pesaban casi el doble de los de una persona adulta.
En la sexta audiencia del juicio por la muerte de Diego Maradonase conocieron los detalles de la autopsia: un casi cuatro litros de agua en el abdomen, signos de una larga agonía y un corazón lleno de grasa.
Los peritos Patricio Ferrari y Cosme Iribarren expusieron por primera vez sobre el estado del cuerpo del ídolo del fútbol, luego de practicarle la intervención, el 25 de noviembre de 2020. Según uno de los peritos, la mayoría de ellos pesaban casi el doble de los de una persona adulta.
Esta vez se escucharon los testimonios del director de Medicina Legal de la Superintendencia de Policía Científica, Carlos Mauricio Cassinelli, y el jefe de División Morgue San Isidro, Federico Corasaniti. Son dos de los cinco profesionales que realizaron y firmaron el informe del análisis realizado al cadáver del Diez.
Maradona murió a causa de un “edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca congestiva reagudizada y una miocardiopatía dilatada”, detallaron en el juicio.
“El examen empezó por la cabeza. Tenía la masa encefálica muy congestiva, edematosa, a causa de agua. Pesaba más de lo que pesa un cerebro normal. Luego el cuello: en las cavidades pleurales encontramos líquido, medio litro aproximado en cada uno. Es decir, que los pulmones estaban bien turgentes, con peso aumentado. Estaban llenos de agua“, aseguró Cassinelli.
De acuerdo con su testimonio, el agua se pudo haber acumulado en su cuerpo a causa de la miocarditis y la cirrosis que Maradona padecía. Aunque, la cantidad que había en su cuerpo “no se pudo haber formado de un día para el otro”.
“Esto viene formándose de a poco y con el tiempo. Pudo haber sido desde que se externó hasta que falleció. No aparece ni en un día, ni en dos, ni en tres, esto es algo que viene progresando. Por lo menos 10 días”, enfatizó el perito.
El análisis de los órganos del deportista arrojó que "los pulmones pesaban entre los dos un kilo cien aproximadamente. Son 170 gramos más que un pulmón normal de un adulto. Tenía un edema agudo de pulmón”, continuó detallando el perito.
En cuanto al corazón de Diego, confirmó que el paciente habría sufrido una larga agonía antes de fallecer, que pudo haber comenzado hasta 12 horas antes. “El corazón pesaba 503 gramos, el doble que un peso normal para una persona adulta. Tenía todo grasa en las paredes. El aumento del peso se debe a que estaba gordo, a que tenía mucha grasa y que estaba dilatado. Tenía una miocardiopatía dilatada”, explicó el testigo.
“En el corazón había coágulo cruórico que significa agonía. El paciente tuvo una muerte y estuvo en agonía. Esos coágulos solo aparecen en ese caso. Son de color rojizo", remarcó el forense.
Agregó: “Por eso, teniendo en cuenta lo que teníamos en ese momento, surgió que (Maradona) no habría tenido controles por lo menos a partir de las 00:30 del 25 de noviembre. Podría haber estado 12 horas en agonía”.
Puso énfasis en que "tenía los riñones aumentados de tamaño. Macroscópicamente, eran riñones enfermos, y tenía casi cuatro litros de líquido en el abdomen”.