Las indagatorias contra los acusados por la muerte del cantante Liam Payne, quien falleció el 16 de octubre tras caer del tercer piso del hotel donde se hospedaba en Palermo, comenzaron este martes y dos de los imputados se negaron a declarar.
Este martes comenzaron las indagatorias en la causa que investiga la muerte del excantante de One Direction. El empleado del hotel y el supuesto dealer no dieron su testimonio ante la jueza.
Las indagatorias contra los acusados por la muerte del cantante Liam Payne, quien falleció el 16 de octubre tras caer del tercer piso del hotel donde se hospedaba en Palermo, comenzaron este martes y dos de los imputados se negaron a declarar.
La jueza Laura Bruniard determinó que las audiencias indagatorias se lleven a cabo entre este martes y jueves 19 a través de la plataforma virtual Zoom. Hasta ahora no se ha podido establecer de manera fehaciente cómo se produjo el episodio donde el ex One Direction perdió la vida.
El empleado del Hotel CasaSur, Ezequiel Pereyra, y el supuesto dealer, Brian Paiz, se negaron a declarar ante la jueza. Ambos están acusados de haberle suministrado estupefacientes a Payne, quien según la autopsia estuvo consumiendo alcohol, cocaína y antidepresivos durante al menos tres días antes de su muerte.
Los peritos forenses detectaron droga en la orina, sangre, contenido gástrico y fosas nasales del cantante. Además, el análisis toxicológico reveló la presencia de sertralina, un potente antidepresivo que se comercializa en Estados Unidos bajo la marca Zoloft.
En la causa también está imputado el empresario y amigo de Payne, Rogelio Nores, acusado del delito de abandono de persona seguido de muerte. En los últimos días se sumaron las imputaciones del jefe de seguridad del hotel, Esteban Reynaldo Grassi, y la gerenta del lugar, Gilda Martín. Aunque no trascendieron los cargos, a Grassi se lo apunta por la llamada al 911 previa al hecho.
Luego de las indagatorias, la jueza Bruniard deberá decidir si procesa o no a los acusados y, además, si les dicta la prisión preventiva. Mientras tanto, la Policía de la Ciudad continúa las pericias sobre los teléfonos de Nores, Paiz, Pereyra y una de las trabajadoras sexuales que estuvo en la habitación de Payne antes de su muerte.